domingo, 13 de junio de 2010

El valor de la democracia

Mi amigo, profesor y editor Eduard Gonzalo me envia un artículo que no quiero que se quede en el cajón de los recuerdos en esta fecha del triunfo histórico de Sandro Rosell. Lean:

Las elecciones a la presidencia del F.C. Barcelona tuvieron su verdadero inicio con la presentación de la candidatura de Sandro Rosell y con la rueda de prensa por èl convocada al día siguiente en su local social. En ella el candidato mejor posicionado inicialmente para alcanzar la presidencia de la entidad desgranó prácticamente la totalidad de las principales líneas de su programa de las que poco se apartaría con el transcurso de los días. Su reaparición mediática fue acompañada por la publicación de una encuesta, primero en el semanario “Gol” y después en el rotativo el El Periódico de Catalunya que le otorgaba una notable mayoría. A partir de entonces, todos los medios fueron unánimes en valorar que el desenlace del proceso vendría dado por el posible desgaste del candidato Rosell que difícilmente podría mejorar sus expectativas. Mientras todos los candidatos trataban de obtener las firmas requeridas se produjeron algunos incidentes de desigual importancia y valoración aunque en general de escaso interés para los socios. Uno de ellos fue la incomprensible lógica jurídica de la entidad que mientras obligaba a Rosell a utilizar el nombre inscrito en su partida de nacimiento Alexandre y no Sandro como es conocido por la masa social limitaban incomprensiblemente la presencia de los interventores de las diferentes candidatos obstaculizando tanto la eficiencia del proceso como la imprescindible garantía que exigen los procesos democráticos. El asunto se saldó finalmente con sendas resoluciones de la Federación Catalana de Fútbol que le dieron en todos los casos la razón al equipo de Rosell. Otro de los temas que marcaron esos días fueron dos noticias. Una de ellas apareció en el diario Expansión y hacía referencia a la presentación de un concurso público de acreedores de una de las empresas de Marc Ingla. La segunda apareció en el blog “ Amb sal y pebre” del antiguo jefe de comunicación de Laporta que cesó después de la moción de censura donde se aludía a la implicación de una empresa de Sandro Rosell en un caso de corrupción administrativa en Brasil a raíz de la celebración de un partido amistoso entre Brasil y Portugal. Los derechos de los partidos amistosos de ambos combinados. La primera noticia apenas fue comentada mientras que la segunda intentó magnificarse. En realidad se trataba de la instrucción de una diligencia de la ministerio público de Brasilia contra las negligencias legales cometidas tanto por el Gobernador de Brasilia como por el ministro de deportes a la hora de contratar y licitar debidamente en tiempo y forma a la empresa prestataria del servicio propiedad de Rosell. Se trataba simplemente de lo que en el derecho luso se conoce como Accao Publica Civil por Improvidade Administrativa, es decir de una solicitud de inicio de diligencias civiles por negligencias administrativas. El tema fue magnificado por parte de algunos de los actores diciéndose que Rosell estaba acusado por cinco fiscales, ignorando supongo los que de este modo se pronunciaron, que los procesos en que se solicita acusar a entidades públicas tienen este requisito y que tiene sus orígenes en el derecho inglés heredado. La falta de fundamento del asunto hizo que pronto desapareciera de los medios de comunicación.

La precampaña terminó sin sorpresas o sorprendentemente, depende de cómo se mire el asunto. Sin sorpresas porque era lo esperado y sorprendentemente porque estas cosas suelen ser siempre más fáciles para la candidatura oficialista. Es decir, Rosell obtuvo un número de firmas superior al cosechado conjuntamente por el resto de los aspirantes. Tras unos días de impasse se inició la última semana de la campaña en que debían celebrarse cuatro debates entre los cuatro candidatos que se percibían decisivos para conocer las dotes de persuasión de los candidatos, como para decidir el voto de los numerosos indecisos. El primer debate se celebró en la Catalunya Radio bajo la batuta de Manel Fuentes. Lo más destacado del mismo fue el ataque que Marc Ingla inició contra Sandro Rosell, cuando aun el moderador estaba haciendo a los candidatos una serie de preguntas para fijar una primera toma de posiciones. Lo impetuoso del mismo era ciertamente parejo a su carácter anecdótico. Marc Ingla alternaba frases melodramáticas como “Quitate la careta” con otras de corte más fingidamente paternalistas como “No te de vergüenza decir que eres intervencionista”, “Ya sabemos que te lo cargarás todo”. Todo ello para intentar transmitir supongo una preocupación se percibía más como una artimaña retórica que como algo nacido de la convicción que si Sandro ganaba las elecciones actuaría como una especie de feroz taliban mientras cortaba cabezas a su alrededor como si de Sandokan se tratara. Lo cierto es que si de algo no tiene ninguna pinta Rosell es de ser proclive a los excesos. Y finalmente si de algo se le puede acusar es de tibieza. Rosell capeó el temporal sin otro menoscabo que el de dar la sensación de que como polemista estaba lejos de ese carácter de fino estilista que se le atribuye al equipo de sus/nuestros amores. En su defensa hay que decir que al final de la campaña dejo la sensación de ser un rocoso y ágil fajador. El atrezzo del asunto lo puso Agustí Benedito que sorprendió con un discurso despreocupado y hábil aunque correoso y un tanto superficial. Eso le permitió apuntar que el modelo no son las personas y dejó a Ingla bastante al descubierto. Y criticó a Rosell por una supuesta aunque no dolosa coincidencia con algún miembro de los Boixos Nois. Esa fue la principal crítica que le dirigió al favorito durante toda la campaña aunque eso sí la supo administrar con la precisión de un boticario y el suspense de un escritor de novelas de policíacas. En el segundo debate destiló la segunda dosis de manera enigmática al decir que nunca votaría a Rosell, lo que permitió amagar la proposición de un pacto cautelosamente. El tercer día le preguntó también tímidamente si había firmado algún papel con los miembros de ese grupúsculo y el cuarto día le aseguró que los Boixos estaban y se habían metido en su casa como quien augura la inminencia de la guerra de Troya. Rosell, sacó su mejor atuendo de seriedad y convicción institucional y le dijo con sincera actitud de condena a la violencia. Yo por un momento me imaginé la respuesta que le hubiera dado el verdadero autor de concepto de “violencia cero”, el implacable orador y político Giuliani que hubiera sido algo así como: “Permítame señor Benedito que continúe y profundice en el delicado entramado de su casuística policial y le diga que si usted sabe que han estado en mi casa solo puede ser por razones o bien porque ellos se lo contaron, lo cual supone que usted los trata no por descuido sino a sabiendas o, tenga por seguro que estoy convencido de que no es así, o que usted me los envió.”

El segundo debate, esclavo del micrófono que viene y que se va. Afianzó la posición de Rosell que pudo explicar su proyecto con notable coherencia, nos hizo ilusionar con el Espai Barça y dio un ligero estirón de orejas a los oficialistas con el retraso en la construcción de la nueva masía. La poca efectividad de la andanada del día anterior le debieron recomendar a él o a sus asesores que pusiera cara de ursulina y desgranara con pulcritud el discurso políticamente correcto del partido del gobierno. Pero eso sin RubalcabaJaume Ferrer continuó con su talante de “esto no va conmigo” o “esto del hijo pródigo es una forma de hacer el primo”.

El tercer debate fue el más interesante. A mí al menos me sirvió para darme cuenta de la insoportable levedad del tema del “modelo” y de la acusación de “intervencionismo”. Ingla volvió al ataque y con cara de no haber roto un plato continuó con la estrategia del miedo, más antigua que el ir a pie en el, del caos subsiguiente al cambio, que claro no puede ser otra cosa que malo. Volvió a apelar al temor que tenemos los culés de que alguien venga a romper el arrobo y la felicidad de los últimos tiempos. Y a uno le parecía oír algo así como: “Eres un niño malo, muy malo, Sandro. Te acuerdas que siempre le replicabas al Maestro. Tu acuerdas de la cara de frustración que ponía ese buen hombre, ese santo varón que se llama Txiqui, cada vez que tu sacabas tu cromitos de belcebús”. Vas a despedir incluso a la mujer de la limpieza malvado ser, que lo sé… Pobre mujer, el marido alcohólico, los hijos drogadictos y tu zas como un elefante en una cacharrería, despidiéndola y el pobre director de la hora del patio, también despedido, que crueldad, para poner a todos tus amiguitos que están esperando en la puerta como enanitos malvados de tu proyecto de caos y destrucción. Ante tan histriónica actitud, Sandro Rosell que no tiene nada de tigre pero si bastante de obstinado paquidermo al final se olvido de que eso de los debates no es lo suyo, dejo de entretenerse en confusos preámbulos, de dar interminables rodeos, de rehuir el cuerpo a cuerpo, de refugiarse en la tediosa tibieza que transmiten sus cuarteles, de apartarse del cicatero guión de sus asesores y terminó el debate con la convicción que hasta entonces le había faltado de de liberarse un poco del corsé del cicatero guión de sus asesores. Total, como al día siguiente perfectamente resumió Dagoberto Escorcia: “Tres planes y un borrador”. El último debate. Fue también bastante curioso. En primer lugar porque, lo digo con todo cariño, si hay una persona que uno nunca pondría a moderar un debate electoral es a Lluís Canut. Persona a quien no conozco personalmente pero que a conseguido por su honestidad y barcelonismo que todos le tengamos mucho cariño pero que cuando hay tensión el parece que en cualquier momento se vaya a comer los puños. Volvieron a salir las mismas cosas, los cromos de Rosell, las masías globales de Ingla, las miserias y grandezas del presi saliente, las dificultades para hablar de economía con precisión y naturalidad, que tenemos las personas normales, el socio, el socio de Sandro. Sin embargo al final se colaron de rondón algunas cosas que están bastante lejos de no ser un problema. Por ejemplo, salió a relucir de nuevo el tema de Uzbekistán, un tema espinoso, se volvió a acusar a Sandro de tener negocios en el fútbol, Benedito insistió comparando Uzbequistán con Qatar. Rosell aguantó mirando la hora, perdonó detalles y pasó de puntillas sobre algunas cosas y omitió algunas otras. Pero claro cuando cae el telón uno siente un ligero malestar en el estomago y le asaltan poca lucidez que le queda. Y se pregunta si los negocios de Rosell no serán un interminable campo de batalla para dividir el barcelonismo, si hacemos bien en pasar de puntillas sobre nuestros esponsors internacionales o si será verdad que podemos separar el fútbol de la política. Pues sí fíjense Herbalife es una empresa piramidal, lo que ya es inquietante, y además resulta que desde el ministerio de Sanidad español hasta numerosas y reputadas publicaciones académicas advierten de que la composición de sus productos contienen sustancias hepatotóxicas que pueden perjudicar, entre ellas la controvertida Efedra, y si miran la pagina web de tal institución verán a Messi luciendo en el antebrazo de esa camiseta impoluta el logotipo de la marca. Y, por si eso fuera, resulta que ese magnífico convenio que en sus día firmara Soriano a bombo y platillo, ostenta el monopono se si es que yo he caído del burro y todo el mundo lo sabe o es el operador de telefonia,que tiene el monopolio de las comunicaciones en los Emiratos Árabes y que escudándose en la religión y en proteger a los niños de la pornografía sirve para censurar las tímidas voces de valentía que defienden la libertad de prensa, para impedir que la gente intercambie ideas y opiniones en las redes sociales, que las ideas las sospechas y las inquietudes desaparecen como arte de magia de Facebook o de Twitter, que detrás del glamour de Choppard o del lujoso reloj obsequiado a discreción a los famosos se oculta un régimen comparable a la Alemania de Hitler aunque se enmascare tras una díscola princesa unos euros para pagar un amistoso y algunas complicidades. Ya se sabe siempre hay algo que se ocupa tras las mejores apariencias. No se preocupen porque hoy hay nuevo presi, que trabaje, y mientras disfrutemos de la topología de sueños e ilusiones que nos regala nuestro equipo. Sin olvidar que algunas cosas son exigencias del sentimiento que nos une.